Volvemos con una nueva ronda de opiniones de series, en esta ocasión nos encontramos con las siguientes: El Mentalista, Grimm, Castle y Anatomía de Grey. ¿Queréis saber mi opinión? Pues aquí va...
EL MENTALISTA (Temporada 6)
Nos encontramos con una temporada diferente, atrevida y con un gran cambio en los personajes. Empezamos por el hecho de que ya, por fin, se conoce la identidad del ya archiconocido John El Rojo. Y aunque muchos no lo esperen, esto ocurre a mitad de temporada. Si, como leen, algo excesivamente arriesgado pero que apenas se ha notado en las audiencias.
Después de este asunto, nos encontramos con un Jane más tranquilo, más persona, y más cercano a sus amigos, esos que lo han ayudado desde el comienzo de los comienzos a esclarecer el caso de su hija y su mujer. Con un final propio de esta serie, con amor, comedia y drama, cualquiera diría que renueva pues el final no puede ser más cerrado, pero lo cierto es que aún nos queda una séptima temporada después de tanta intriga de si continuaba o no.
Una serie que mantiene la originalidad de sus inicios, con grandes y mejores interpretaciones y con muchos más casos por resolver, siempre con la chispa del protagonista, algo a lo que nos tiene más que acostumbrados.
GRIMM (Temporada 3)
Esta serie de ficción tuvo un inicio un tanto titubeante, con poco de lo que agarrarse, hasta que volvió a utilizar las tramas a medias como el de la familia real o las llaves, de la temporada anterior y añadió nuevos giros inesperados en la historia.
La trama fue cogiendo peso por si sola, sin que ningún capítulo sobrase ya que en todas comenzaron a hilar una trama continua olvidando los episodios independientes de la que se compuso la primera temporada. Para mi gusto, la serie ha ganado en seriedad y fuerza, las actuaciones de sus protagonistas son más sobrias y las sorpresas invaden cada capítulo.
El final es increíble, no deja a nadie indiferente, sin duda, el mejor final para la mejor temporada de lo que llevamos de serie, en mi opinión.
CASTLE (Temporada 6)
Una serie que, como pocas, ha conseguido mantener una línea regular durante todos los capítulos que componen la temporada. Comenzamos con la propuesta de matrimonio de Castle a Beckett y nos mantienen informados durante toda la temporada de los preparativos de la boda.
como viene siendo habitual, la historia de la madre de Beckett la tocan unos dos o tres capítulos por temporada, normalmente, siempre al final, algo que no me agrada del todo porque parece que el resto es puro relleno de entretenimiento, pero es que, en realidad, lo es.
Con un final impactante, un inicio muy fuerte y unos personajes que aún no han perdido ni la gracia ni su don, es una serie más que recomendable para entretenerse en cualquier momento.
ANATOMÍA DE GREY (Temporada 10)
Esta serie la cogí con ganas, pues las anteriores temporadas fueron frenéticas y llenas de giros sorprendentes, pero debo decir que esta temporada me pareció de las más irregulares de la serie y es que éste es el fiel ejemplo de que enrizar el rizo no es siempre lo mejor.
Con un comienzo que daba mucho que desear, nos llegó la noticia un par de meses después de la retirada de una de las actrices más carismáticas de la serie y de las que comenzaron desde el primer capítulo, Sandra Oh (Cristina Yang). De la mitad de la temporada hacia delante, la historia fue cogiendo algo de fuerza y consistencia, enganchándome un poco más a la trama con casos médicos brutales, lo mejor para mi gusto de esta temporada.
La serie se despide con una integrante menos, pero con nuevas incógnitas en el camino, nuevas caras y nuevas aventuras. ¿Qué pasará con Derek y Meredith? ¿Qué le tendrá guardado el destino a Jackson y April? ¿Quién ocupará el puesto de Cristina en la junta del hospital? Un culebrón en toda regla aunque en esta ocasión, no me terminó de convencer.
Ya vendremos más adelante con una nueva opinión de series, mientras tanto puedes leer el anterior, Opinión de series #1.